lunes, 1 de agosto de 2016

PANAMÁ: DEL ESPEJISMO A LA CRISIS

Quienes me decían que Panamá  no sería golpeada por una crisis económica  porque  "el panameño no lo permitiría", hoy se deben acordar de esa ilusión, especialmente quienes cierran un nuevo mes sin ventas o con cifras menores...



En lo que va de 2016, son miles quienes han perdido sus entradas económicas por cierres de empresas o por causa de la llamada "contracción" de la economía panameña.

Y vamos sumando....

Para quien tiene empleo, el "estancamiento" en la economía nacional le supone una lógica presión por mejorar sus resultados y al mismo tiempo, es una invitación a ajustarse la correa para que la quincena alcance.

Para quienes tienen negocio propio, la presión es aun mayor...



La medida más leve es la austeridad en el gasto pues se llega a los cierres y despidos... Y eso, sin contar a quienes se ven involucrados en escándalos, que se suman al contraído acontecer nacional.


No voy a entrar a analizar el porqué de la actitud del Gobierno con sus proveedores... justo veíamos hace unos pocos días en los medios que según el Sr. Contralor  General de la República el estancamiento de todas esas cuentas adeudadas y contratos parados es una medida de  transparencia y cumplimiento... No nos queda más remedio que aceptar "pulpo" como animal de compañía...

Por favor no se vayan a deprimir, no es esa mi intención, al contrario; hoy me gustaría ayudarlos a ver que este tipo de situaciones no son más que una prueba que debemos tomar como útil. Una contracción o crisis suele ser fruto del necesario balance y superarla nos hará más fuertes y prósperos.

En toda crisis muere una ventaja arrastrada y nace una nueva oportunidad.

Admitámoslo, vivíamos en un espejismo!...  Si éramos tan prósperos con las vacas gordas, díganme porqué éramos el país con el mayor endeudamiento personal del continente?

Esa burbuja tenía que reventar, o por lo menos desinflarse, pues en medio de ese mar de abundancia, manteníamos grandes focos de pobreza y desatención social, que se barrían bajo la alfombra.

Quizás sin ser su intención (no de forma consciente), el actual gestor de las arcas públicas nos lleva a poner forzosamente un orden más estricto  en nuestras vidas. En el periodo pasado muchos se enriquecieron de la noche a la mañana, pero estaban de veras construyendo un negocio sostenible?
Es posible que quienes estaban más preparados (los menos) aprovecharon para construir un imperio sostenible... Pero otros (los más) construían  fantasías  efímeras que promovían la deuda en todas sus versiones...



La realidad es que hoy la competencia en los negocios requiere de herramientas y estrategias más exóticas que hace una década... No se puede ser sostenible sin una la verdadera calidad de servicio ni una verdadera capacitación del recurso humano. Tampoco se puede mantener el éxito sin honradez en la prestación  del servicio, por lo menos no en la mayoría de los casos...El público de hoy se informa, compara, juzga y sentencia con el arma más poderosa: la libre decisión de consumo.



Ya no puede volverse a dar la construcción un edificio con techos de "papel cartón" que se desmorone al mes de haberse comenzado a usar por sus primeros residentes...

Ya no puede volverse a pretender que alguien pague por un auto asiático de gama media lo que otros pagan por un auto de lujo...

Es insostenible pagar 20usd por una cena mediocre en un restaurante de comida rápida  o de dudosa calidad...

Y no tiene sentido ir subiendo salarios solo para que haya más líquido para invertir en productos de menor calidad...  afectando a la industria nacional y al pequeño empresario... Veo que la gente está aprendiendo a cultivar verduras en su apartamento y se torna más austera en su programación de vida. Hasta cierto punto, es un comienzo hacia una mayor sostenibilidad.

Otro mercado duramente golpeado es el de los seguros de salud. las compañías aseguradoras se confiesan "inocentes" por sus astronómicas subidas de cuota, ellas alegan que no nos quienes ponen precio a la salud, sino que son los hospitales y los centros privados de salud quienes están subiendo todos sus costos.

Hoy son menos quienes pueden permitirse un seguro privado de salud, también son menos los que pueden pagar una escuela privada a sus hijos, pero los servicios públicos siguen deficientes. Lo curioso es que los servicios públicos, especialmente la salud y la educación  ya eran deficientes antes de esta "contracción", pero no parecía preocupar tanto, por lo menos no a la clase media...

...Como respuesta, sube como la injesta de vitaminas y suplementos, crece la practica de rutinas de vida saludable y la integración de una cultura preventiva...

Digo, no hay mal que por bien no venga!


La verdad es que lo único que da bienestar en una sociedad es el equilibrio entre necesidades reales y lujo... Si bien los gobiernos socialistas del nuevo milenio han resultado un total desastre, porque el ser humano debe vivir con toda libertad y tiene que poder tomar decisiones, desarrollar negocios, innovar y compartirlo, el capitalismo "salvaje" tampoco ha funcionado. Éste termina por ser un ataque depravado al bien de la mayoría que suele permitirse a la medida de unos pocos, ridículamente mal preparados, pero sobrados en cuanto a falta de escrúpulos. Y en el caso de Panamá, para colmo de males, seguimos si alcanzar los objetivos del milenio, otra vergüenza...!


Así pues, esta crisis le dice al panameño que se acabó el tiempo de "papá  Gobierno".

Amigos, pongan a sus hijos a leer mucho y a estudiar más porque llegó el tiempo de aprender a diferenciar prioridades. Ya nos toca ser un poco más austeros... un poquito... pero exigiendo a los servidores públicos que hagan lo propio, servir!

Dejemos el llanto y subamos esas mangas que hay mucho que hacer... como reza el himno nacional... al trabajo sin más dilación... pero ojo, con calidad, con auto crítica, buscando la excelencia y recuperando cierto espíritu de grandeza y de dignidad que parece haberse perdido.

Al fin y al cabo, hacer de la crisis una plataforma para una mejor vida, como todas las cosas importantes en este mundo, solo es cuestión  de actitud.

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